La libertad no es una bandera, un valor abstracto, es una exigencia. Es un camino de atrevimiento y una batalla en primer lugar personal.
No es una lucha, es una apertura, una liberación, una desinhibición, una sensualización de la personalidad.
La libertad conviene pensarla como una exigencia personal (que combina con la capacidad de ser autentico y bancarselá, con la de ser libre para decir lo que uno quiere, y para poner en despliegue los medios de conseguir las cosas, con no sentirse mirado y evaluado, es decir, vivido desde la vida de otro, con poder conocer las cosas como son sin compromisos ideolóicos ni posiciones pre tomadas)
Alejandro Rozitchner
